jueves, 5 de julio de 2012

La Muñeca rusa



Excelente libro, divertido, asombroso. El día que terminé de leer “La muñeca rusa” de la argentina Alicia Dujovne Ortiz soñé que estaba en Buenos Aires. Esa tarde salí a correr y vi en el parque una horda de chamacos violentando a las aves con resorteras y reafirmé que la guerra es donde se mata a muchos por no pensar igual. Gente se muere en la guerra sin que nadie haya entendido ni cómo ni por qué.

Creo que Felisberto Hernández ha sido durante años, un autor de culto. Un poco porque no era muy conocido por muchos, otro poco porque conseguir un libro de él era algo prácticamente imposible

 En el transcurrir del libro hay partes, más bien dicho frases muy poéticas:

“muerto por su cuenta mientras los gigantescos animales aullaban alrededor de su cuerpo cubriéndolo de besos.”

En el libro aparecen de repente “Trotsky, el Che y Salvador allende, Cortázar, Quiroga, el avión espía U 2, Siqueiros y Frida Khalo”

Felisberto con su empleucho de espía radial y escribe sus cosas. Lee a María Luisa su último cuento
 “robaba con los ojos cualquier cosa descuidada en la calle o del interior de las casas y después la llevaba a mi soledad. Mis ojos elegían un objeto cualquiera y se lo iban tragando despacio”

Ya leí ese cuento se llama “EL COCODRILO” lo imprimí directo desde el internet. Me reí mucho, y entendí lo que Alicia Dujovne Ortiz a mi parecer a manera de homenaje escribe en su MUÑECA RUSA
La fama de Felisberto se ha extendido, pero sólo entre exquisitos, entre iniciados, entre lectores sabedores de que Cortázar y Calvino lo han puesto por las nubes. Ni es un vendaval que sople las librerías (demasiado enigmático) ni tiene un sitio en este mundo donde dejarle una flor (demasiado volátil)

Sobre África María de las Heras que más se puede decir.. fue un placer conocerla a través de la impresionante e increíble historia de Alicia Dujovne Ortiz

 


Nombre clave de una chaparrita de lentes que me gusta. “Tortuguita ninja”