lunes, 21 de abril de 2014

Gabo???? No sean nacos!!! No era su abuelo, ni su tío, mucho menos su vecino!

Para Ady




Gabo…. Bola de confianzudos, de igualados. El viejo escribía fabuloso, un gran narrador, y una gran compañía para este lector. Nos conjuntamos bien, el escribiendo y yo leyendo; disfrutando sus historias de amor.



Nacos, nacos, nacos...son una bola de nacos!!

Pa’ los cuates:

Octavio Paz “tavo” Mario Vargas Llosa “varguitas” Jose Emilio “pepé” .



Soy un maldito amargado al que no le gusta la semana de la “pasión”, la semana “santa”, esta ciudad de México esta así por esas costumbres fuera de siglo, retrogradas, fuera de lugar, esta ciudad apesta, huele mal. Ojalá y la mayoría leyera como hacen creer los noticiarios o redes sociales, Ojalá y hayan leído un libro de García Marquez los que asistieron al viacrucis de Iztapalapa, Ojalá y leyeran los que se mojaron en el monumento de la Revolución, o en las calles capitalinas. Leer no te hace buena onda, o superior, pero creo que si te hace sensible y menos salvaje, menos irracional.



Hasta su cancioncita tiene!!!



Y que entrevistan al ex presidente. Al malo de la película, al chupacabras, al innombrable. Y salió con una GATADA, una peladez, una NACADA, refiriéndose al finado- célebre-escritor como: EL COLOMBIANO MÁS MEXICANO.



Ni hablar del oscurantismo de la “semana santa” de las representaciones salvajes y llenas de barbarie, de fatalidad, de terrorismo. Porque si ver a un SER HUMANO siendo vejado y torturado por un ejército de ocupación y ser seguido por una bola de plebeyos, morbosos y cobardes, no es terrorismo, entonces no sé que sea eso. La televisión pasa imágenes, pasa el recorrido, los tumultos, y también a la gente diciendo maravillas del muerto. No es un muerto ordinario, es un muerto genial, que escribió del amor. Que según como el de la cruz (al que asesinaron) predicó amor.



Con Ady nunca platiqué de García Marquez, me quedé con las ganas de platicar con ella, de tomar vino tinto y abordar los Cien años de soledad, el amor en los tiempos del cólera, La increíble y triste historia de la cándida Eréndira y su abuela desalmada, memoria de mis putas tristes, doce cuentos peregrinos…







Y no podré escuchar la preciosa canción interpretada por Oscar Chávez en años pues ya me hicieron odiarla de tanto repetirla, esa de las mariposas amarillas…