Después del concierto de Cecilia Toussaint mi amiga buscó un regalo en la acera del Metropolitan.. Encontró el regalo perfecto (para mí) para él (su novio) el acetato del disco de Jaime López. Ese que fue grabado en Nueva York en el año 1986. Digo que es un regalo perfecto (para mí) porque es un disco que luciría muy bien colocado en un lindo marco con un cristal anti reflejante. Ese disco es uno de mis favoritos. Aún tengo el cassete que por nostalgia a veces lo pongo, digo nostalgia por la manera de reproducirlo en la “grabadora”. Porque esas canciones siempre están presentes en mi; no envejecen, no son corruptibles, y son de esas canciones con las que estoy identificado desde los ritmos, los colores, las texturas, el barrio, Tacubaya, la cerveza etc…”El hombre de Wall street” “Ay Inés” “ Sácalo” “A la orilla de la carretera” … El novio de mi amiga vive ya hace muchos años en los Ángeles, es fan de López y creo que brincará de la emoción al ver tan valioso artefacto.
A todos nos gusta recibir regalos….pero pocas son las personas que le atinan y te hacen vibrar de la emoción… Como aquella Navidad que “J” me regaló el número que me faltaba de “El Santos la colección”.
